Podría jurar que entre menos pienso en que pase algo te encuentro entre la muchedumbre, la última vez era domingo, el sol golpeaba la parte trasera de mi gorra blanca hecha esponja de sudor y entre sorbos de algo parecido al agua te ví, debo aceptar que la primera mirada fue a tu culo, aquel marcado y pomposo balón gris marca PUMA con visos rojos que me hipnotizaba mientras jadeaba tratando de alcanzarte ya que llevaba más tiempo corriendo que tu hermoso cuerpo. El sol no sólo calentaba el asfalto y mis piernas no eran mis únicos músculos tensionados; estaba loco y en mis años mozos atrevido y desenfrenado era en eso de los 17. Quería agarrar tu cintura de 23, rasgar esos chicles, abrir tus piernas y hacerte mía en medio del pavimento acalorado sudoroso y húmedo que pisaba en mi mente.
Tardé en hablarte más por miedo a estar hediondo que por otra cosa, esperé que compraras un salpicón al final de tu seductora jornada y un "hola" bastó para verte nerviosa; (los detalles de la conversación prefiero guardármelos) por la misma, quedamos que en 198 horas luego de despedirnos saldríamos a tomar cerveza a unas cuadras de ahí y así fue. Cambiamos la caliente calle por un par de sillas de metal frías y en ese otro ambiente hablamos de muchas cosas poco interesantes y tanto las sonrisas como las ganas se diluían como hielos en los vasos plásticos, reunión algo nefasta que a los 35 minutos terminó agonizante.
Raro es el caso que olvidar es la mejor opción para que aparezcas cuando 2 semanas después te vi en las mismas y hermosas condiciones del primer encuentro, esa vez hablamos poco de nuestros pasados y a eso de las 4 de la tarde acabamos en mi alcoba haciendo más ejercicio que en las 2 semanas en que te había conocido.
Antes que tu voz se fundiera en el viento y tu pelo negro muriera en un recuerdo, me di cuenta que no es necesario hablar mucho para estar unido en algo más profundo que la pasión y que seguro estaré presente en tu mente hasta que decidas volver a llamarme, ya que en eso quedamos, tierna aventurera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario