miércoles, 23 de junio de 2010

Una noche cualquiera (Primer escrito)

A veces cierro mis ojos y me pierdo en la música, que más que entretenerme hace que mi mente descanse, duerma una siesta y dormite problemáticas impensadas por alguien que no entiende otra cosa que sólo lo que ve, demasiada información que luego se olvida, cómo leer un periódico completo y al final querer acordarse de lo que decía el primer párrafo; El día en que muera lo que de verdad quiero tener a mi lado es una libreta y no sé que escribiré pero… será algo perfecto. Escribo a veces por sentirme escuchado, lo publico ante los demás para sentirme vivo y lo cayo porque es más fácil escribir y guardar que hablar a medias y sentirse incompleto al final.
 Existen textos prohibidos, textos que hacen llorar, textos que posiblemente sólo yo entiendo, textos que puede que a nadie le gusten porque no son perfectos, textos profundos que contrastan con la información que diariamente doy ante el mundo y que aunque no quiera y la verdad sea de mi conocimiento están manipulados, textos que matan y reviven al fénix dormido, en fin momentos de lucidez espiritual y de gozo karmático que no me importa si se entiende o si se gusta… sólo escribí en un momento donde la voz de lo profundo llama y dice “estás solo y quieres apasionarte” un momento antes de ir a dormir, volver a cerrar los ojos y vivir momentos del pasado con otro enfoque en el presente, porque leyendo mis propios textos sé que extraño vivir acontecimientos que igual, llegarán.